Comer es más que Alimentarse
El gusto es uno de los sentidos más desarrollados en los personajes, sean humanos o no, de muchos cuentos populares africanos y de los cuentos de autores europeos ambientados en el gran continente. Al repasar las páginas que plasman un saber antiguo, los productos de la cosecha, los platos preparados, los aguardientes tradicionales y los rituales ligados a todo ello trasladan al oyente neófito a un mundo de sensaciones culinarias insospechadas. El continente africano es un crisol de culturas, etnias, paisajes, climatologías, lenguas (autóctonas o implantadas a raíz de la colonización), literaturas (de transmisión oral o escrita) y estructuras sociales y políticas tan dispares y complejas, que la utilización del adjetivo africano no debe inducir a una generalización ingenua por parte del lector de estas breves líneas. El propósito de tal utilización es hacer posible una rápida excursión por las delicias de algunas de las gastronomías del continente y su inclusión como elemento narrativo de importancia radical en muchos textos escritos sobre África o por autores nativos, para que el lector neófito descubra un mundo de sensaciones culinarias y literarias a la vez, ambas ligadas a una rica sabiduría ancestral, sin por ello tener que detenerse en ciertos pormenores geográficos. Aún así, para adentrarse en un mundo tan sugerente, en el que se funden sinestésicamente vista, paladar, olfato y tacto, la lectura de algunos manuales de cocinas africanas resulta reveladora para la comprensión del fenómeno. En ellos el lector encontrará mucha información sobre los alimentos básicos que componen la dieta de las poblaciones de las distintas zonas del continente, sobre su preparación, sobre la utilización de abundantes especias que enriquecen los platos y guisos, sobre las bebidas, alcohólicas o no, que riegan las comidas, e incluso sobre la forma de preparar dichos manjares y dónde encontrar los ingredientes típicos en las distintas ciudades españolas.
La multiplicidad de paisajes y climas condiciona la composición de los platos y bebidas de cada área del continente. Si se toma como referencia la producción de cereales, por ejemplo, los cultivos varían necesariamente de una región a otra; en el Golfo de Guinea, el más utilizado es el maíz, por lo que su consumo y elaboración condicionarán los textos literarios procedentes de aquella zona, al incluirlo como elemento esencial y simbólico de los relatos y cosmogonías a los que tenemos acceso. Los tubérculos más difundidos son el ñame y la mandioca, largamente usados en elaboraciones gastronómicas de toda el África central y occidental, mientras que en las zonas más secas se cultiva el mijo, por su gran resistencia a las épocas de escasez de agua, especialmente en las áreas próximas al Sáhara; el arroz se considera a la par que un artículo de lujo, puesto que se importa de zonas más húmedas.
Casi todas las transcripciones están hechas por parte de antropólogos, viajeros o incluso misioneros de historias que se han ido transmitiendo oralmente durante generaciones en ámbitos mayoritariamente rurales de países del África central o del África occidental en este caso y de todas las regiones del mundo que iremos recorriendo. Se trata de una literatura coral, más que nunca expresión del dinamismo de un pueblo. Los textos que se recogen a continuación se pueden agrupar en dos apartados bien distintos por sus enfoques y por el tratamiento que dispensan a los africanos.
El primero reúne los cuentos publicados en las décadas de los 40, 50 y 60 del siglo pasado, en una época en que, por lo menos con referencia a España, los territorios africanos aún dependían política y administrativamente de la metrópoli.
En la recopilación Rocío de la Mañana y otros cuentos africanos5 el relato que abre el volumen narra las peripecias de una joven que, una vez obligada a casarse por su madre con un joven que la pretendía, descubre con desilusión cuál es el secreto para satisfacer a su esposo. He aquí el diálogo entre la madre de la muchacha y el joven antes de que se lleven a cabo las nupcias:
— ¿De veras, madre mía, que es una bonita muchacha? ¿Y sabe cocinar el pescado y hacer buenas tortas?
— Es tan bella como los capullos del mango salvaje cuando cubren el suelo en primavera. Y he saboreado su guiso de pescado y el caldo que prepara…
Una vez celebrada la boda, la joven Rocío de la Mañana comprueba que para satisfacer el prodigioso apetito de su marido tiene que emplearse a fondo para cocinar los más exquisitos manjares, desperdiciando en esta tarea todo el día. En vez de dedicarse a recoger flores, tenía que pescar o recoger huevos para echar a la sopa, con lo que se puso delgada y débil. El desenlace depara una sorpresa para los pequeños lectores del cuento: la huida del hogar de Rocío, para rebelarse a su destino de cocinera y buscar una vida más llevadera lejos de la nefasta influencia y de las expectativas exageradas de su recién estrenado marido. En este caso, el narrador ha insinuado un cierto recelo hacia las supuestas virtudes que debería poseer toda buena muchacha casamentera africana, puesto que todo el discurso que gira alrededor de los alimentos y su preparación (en ocasiones muy ricos en detalles) desemboca en una actitud cómplice hacia la decisión extrema de Rocío de fugarse de casa y abandonar así el hogar conyugal, actitud ciertamente poco comprensible dada la fecha de publicación del volumen y el público al que va dirigido. El alimento, cuando se convierte en razón única de existir de uno o más seres humanos, pierde sus connotaciones positivas y pasa a ser un elemento que justifica la rebelión de una joven en contra de su esposo y la huida de tan agobiante entorno social.
Si bien comiendo logramos satisfacer la necesidad básica de nutrir nuestro cuerpo, las prácticas alimentarias no se pueden considerar sólo desde este prisma, ya que entonces caeríamos en una reducción y una naturalización del hecho alimentario, y esta situación ocultaría los factores sociales, culturales e históricos que acompañan una actividad tan cotidiana como es el acto de comer.
Cocinen con el alma esta Semana Santa !! 🧡