Prosperidad Integral, un Enfoque para enriquecer tu Vida
La buena relación con el dinero es la base de una relación armónica con el mundo
Beatriz Goldberg Psicóloga Argentina
La Prosperidad Integral explica discernir que podemos aprender a generar sostenidamente dinero mientras cultivamos un estado de bienestar, salud, alegría, generosidad y crecimiento en nuestra vida. Desde este concepto holístico, podemos transformar el dinero en una bendición para compartir con otras personas.
Dinero y desarrollo emocional son los conceptos excluyentes y antagonistas; por el contrario, componen una sociedad complementaria y sólida que nos permite desarrollar en plenitud y consciencia a fin de disfrutar y compartir sus beneficios con quienes nos rodean. Al respecto, millones de personas suelen considerar que el éxito de su prosperidad monetaria estriba en cómo ganar y administrar eficazmente su dinero. Si bien es cierto que generar y manejar adecuadamente el dinero es muy importante, existen otros aspectos en que podrían contribuir a nuestra plenitud. Saber disfrutar y compartir nuestro dinero son los otros dos aspectos complementarios de ganar y administrar.
La prosperidad se compone de cinco pilares requiere de nuestra atención, observación y dedicación a fin de crear y sostener un estado de plenitud, armonía y bienestar en nuestra vida.
El Desafío de sostener nuestra Prosperidad
Ganar dinero es tan importante es tan importante como sostener un estado de prosperidad. Millones de personas tienen dificultades marcadas para generar el sustento que les permite vivir cómodamente. Otras tantas son muy capaces de generar dinero, pero no pueden sostenerlo en el tiempo. A lo largo de mis años de profesión me ha tocado atender numerosos casos de profesionales y vendedores que conseguían ganar dinero por rachas, pero irremediablemente fracasaban a la hora de mantener ese ritmo de prosperidad en sus vidas. Detrás de ese sube y baja en sus ingresos monetarios, subyacían razones psicológicas que les impedían mantener un estado de continuidad en sus ingresos. Es importante desarrollar la capacidad de mantener un ingreso a lo largo del tiempo.
Miles de personas de frustran y deprimen debido a que intentan sostener un estilo de vida basado en sus ganancias monetarias fluctuantes. Es así que pueden consumir productos de lujo, asociarse en clubes exclusivos, tener dos autos y enviar a sus hijos a colegios caros. A ellos mismos les puede gustar aparentar una imagen de prosperidad que puede no condecir con sus ingresos monetarios, lo cual los lleva a mediano plazo a endeudarse y angustiarse irremediablemente.
Ganar dinero es importante, pero sostener y aumentar ese ingreso a lo largo del tiempo es una cualidad a desarrollar y entrenar. Llegado este punto, podríamos formularnos una pregunta : ¿ La prosperidad implica poder mantener en el tiempo lo que ganamos, para ir acrecentándolo ? Al respecto podemos decir, en términos generales, que una persona, empresa o país es próspero, cuando sostiene un crecimiento a lo largo del tiempo. Cuando no hay continuidad en las actitudes de conductas que nos conducen hacia un estado de prosperidad, podemos tener altibajos que van minando gradualmente nuestra autoestima y bienestar. Y ello impacta, entre otras cosas, en nuestra capacidad de generar dinero.
La Belleza del Compromiso contigo mismo
La palabra ” compromiso ” tiene varios significados, entre ellos la responsabilidad u obligación que se contrae. Compromiso es una palabra muy bella con connotaciones profundas que van más allá de lo explicado en los diversos diccionarios de la lengua castellana. El compromiso refiere a un pacto o acuerdo que podemos realizar con nosotros mismos a fin de crecer y prosperar en nuestra vida. Toda persona que ha logrado cierto nivel de éxito en su empleo, profesión, emprendimiento o negocio y lo ha mantenido en el tiempo ha desarrollado un nivel de compromiso consigo mismo.
El compromiso involucra situaciones que pueden colocarnos en riesgo, pero conlleva la posibilidad de aprender y crecer, de asumir responsabilidades con nosotros y los demás. A su vez, implica un compromiso que asumimos con nosotros y otras personas en determinados temas ( pareja, trabajo, salidas recreativas, etc). Cuanto más honramos un compromiso que nos ayuda a crecer y evolucionar, obtenemos mayores niveles de confianza, apertura y seguridad en nuestra vida. Aunque también el compromiso puede ser segmentado y traernos problemas. Por ejemplo, existen personas que consiguen comprometerse con su trabajo pero descuidan su aspecto emocional y vincular. Hay quienes concentran su energía en la actividad intelectual, y otros que focalizan su interés en placeres físicos. Cada uno de nosotros, consciente o inconscientemente puede haberse comprometido con algún área o aspecto de su personalidad. También pueden existir dificultades para comprometernos con áreas de nuestra vida que podrían generarnos mayores niveles de bienestar, plenitud y crecimiento. Algunos de los pacientes que he atendido manifestaban problemas para comprometerse en una relación profunda de pareja. Otras trabajan duramente, pero descuidan su salud y recreación. Cuanto más compromisos generamos con las áreas relevantes de nuestra vida estamos contribuyendo a crear prosperidad y abundancia integral.
Miles de personas manifiestan a diario su deseo de ganar más dinero o lograr un lugar de trabajo creativo y placentero; sin embargo, evidencian conflictos internos que les impiden comprometerse con aquellas conductas y actitudes que les permitirían avanzar en sus metas. Uno de los conceptos que más enfatizo en la Diplomatura de Inteligencia Espiritual para Líderes es el valor de construir ” Hábitos de Poder ” que impliquen aquellas pequeñas acciones que repetimos a diario y que contribuyen a aumentar nuestra vitalidad, salud, motivación y confianza interna. Por ejemplo, la práctica de deportes, agradecer a Dios al despertarnos por un nuevo día, practicar meditación o yoga, compartir con amigos, son algunos de los múltiples ejercicios que podemos realizar con cierta frecuencia y que potencian nuestro compromiso interior.
Si deseas lograr ciertos niveles de prosperidad en tu vida, precisas construir hábitos de poder que te ayuden a crear un estado de salud, potencia y bienestar. Desde ahí será más sencillo y accesible desarrollar un compromiso real y factible con tus metas. Esto también te ayudará a construir un compromiso contigo mismo a fin de que logres un estado de prosperidad integral, también te ayudará a lograr un mayor grado de conciencia en ti para reconocer las dificultades y limitaciones que están impidiéndote vivir con plenitud y abundancia.