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Una casa llena de huéspedes pero el anfitrión está ausente

¿Podrías decir algo acerca del silencio la celebración y la vida ?

Esa pregunta tiene muchas implicaciones. No es una pregunta simple, contiene muchas preguntas importantes. Me gustaría entrar en todas sus dimensiones, sólo así podrás encontrar la respuesta.

Lo primero que hay que recordar es que en el hombre hay dos mundo : uno que va hacia afuera y otro que va hacia adentro. El hombre es una dualidad: es cuerpo y alma. Esta tremenda dualidad ha causado todos los problemas del mundo. Y no se trata de una dualidad simple. Es lo que yo he llamado ” Una dualidad gestalt “. En una dualidad gestalt nunca puedes ver ambos mundos a la vez; si eliges ver uno, tienes que olvidarte del otro. En otras ocasiones he utilizado el ejemplo de los libros para niños en los que hay dibujos hechos a base de simples líneas, pero en esas líneas hay dos posibilidades: si te fijas con atención en el dibujo, puedes ver una mujer anciana o puedes ver una hermosa joven. Puedes ver a ambas por separado. Si sigues mirando a la mujer anciana, de repente sentirás un cambio extraño: la mujer anciana ha desaparecido y frente a ti hay una hermosa joven.

Si continúas mirando … los ojos no están hechos para mirar fijamente, normalmente siempre se están moviendo. El movimiento es intrínseco a los ojos. Se cansan de mirar fijamente, siempre están buscando algo nuevo. Por esa razón, pronto verás que la joven hermosa desaparece y la mujer anciana vuelve a ocupar su lugar. Ambas están hechas con las mismas líneas, simplemente son combinaciones diferentes, pero no se pueden ver a la vez. Eso es imposible. Porque si ves a la joven hermosa, ¿ de dónde sacarás las líneas que forman a la mujer anciana? Si ves a la mujer anciana, no tendrás las líneas que forman a la joven hermosa. Se pueden ver por separado, pero nunca se pueden ver a la vez. Eso es una dualidad gestalt, y así es la realidad del hombre.

En Oriente se ha contemplado al hombre sólo como un alma, como una consciencia, como un ser introvertido. Pero por haber elegido una gestalt, tiene que negar la otra. Por esa razón en Oriente los místicos han estado negando consistentemente la realidad del mundo durante siglos. Según ellos, no es más que un sueño, maya, ilusión. Está hecha del mismo material que los sueños. No está ahí realmente, sólo un espejismo, una aparición. Oriente a negado lo exterior, ha tenido que hacerlo por la necesidad interior de la dualidad gestalt.

Occidente ha elegido el mundo exterior y ha tenido que negar el mundo interior. Para Occidente el hombre sólo es un cuerpo. Es psicología, biología, química, pero no es una consciencia, no es un alma; el lama sólo es un epifenómeno. Y por eso, porque en Occidente sólo exterior se considera real, las ciencia pudo desarrollarse. La tecnología, miles de aparatos, la posibilidad de llegar a la luna, y el vasto universo que te rodea. Pero, a pesar de saber tanto, en la mente occidental ha habido un gran vacío: le falta algo.

A la lógica occidental le resulta difícil discernir qué es exactamente, pero están absolutamente seguros de que algo les falta. La casa está llena de inquilinos pero falta el anfitrión. Tienes todas las cosas del mundo, pero tú no estás. El resultado es una enorme desdicha. Tienes todos los placeres, todo el dinero, todo lo que el hombre jamás haya soñado y, tras siglos de esfuerzo, de repente te das cuenta que no existes. Tu interior está vacío, no hay nadie.

Oriente también afronta su propia desdicha. Cuando se piensa que lo exterior es irreal, no hay ninguna posibilidad de progreso científico. La ciencia tiene que ser objetiva, pero si los objetos sólo son apariciones, ilusiones, no tiene sentido diseccionar ilusiones para intentar encontrar los secretos de la naturaleza. Por eso Oriente ha tenido que seguir siendo pobre, ha tenido que seguir famélico, ha tenido que seguir sufriendo todo tipo de esclavitudes durante siglos.

Estos 2000 años de esclavitud no han sido por casualidad. Oriente estaba preparado para ello. Lo ha aceptado, ¿ qué más dá, si es en un sueño, eres el amo o el esclavo? ¿ Qué más da, si en un sueño, te sirven comida deliciosa o pasas hambre ? En cuanto te despiertes, ambas cosas carecerán de importancia. Oriente ha consentido mantenerse famélico, hambriento, esclavo, y eso ha ocurrido por elegir una gestalt diferente : que lo real es lo interior.

Oriente ha aprendido a ser silencioso, a ser pacífico, a disfrutar de la felicidad que emana cuando profundizas en tu interioridad. Pero eso es algo que no se puede compartir con nadie; es absolutamente individual. Como mucho, se puede hablar de ello. Así que, durante miles de años, en todo Oriente se ha estado hablando de espiritualidad, de consciencia, de iluminación, de meditación, pero en el exterior ha seguido siendo pobre, enfermo, hambriento, esclavizado.

¿Quién iba a escuchar a esos esclavos y sus grandes filosofías?. Occidente simplemente se reía. Pero la risa no estaba sólo en una parte. Oriente también se reía viendo cómo las personas acumulaban cosas pero se perdían a sí mismas.

Durante miles de años hemos vivido en un extraño estado mental esquizofrénico.

Tú estás diciendo: << En Occidente, la celebración va asociada al concepto americano de diversión.>> Lo cual encierra otras implicaciones. Sólo un hombre desdichado necesita divertirse. Al igual que un hombre enfermo necesita medicina, un hombre desdichado necesita divertirse; se trata de una estrategia muy astuta para eludir tu desdicha.

Pero eso no evita la desdicha, lo único que haces es olvidarte por un momento de que eres desdichado. Al ponerte bajo la influencia de las drogas, del sexo, o de lo que tu llamas diversión, ¿ qué estás haciendo realmente? Estás huyendo de tu vacío interior. Como le tienes miedo a tu propio yo, te involucras en todo tipo de cosas.

Eso ha producido cierta locura, pero como en Occidente todo el mundo comparte esa misma locura, es muy difícil reconocerla.

Todo el mundo está huyendo de sí mismo. Y a esa huida de sí mismos es a lo que la gente llama “diversión”.

La vida del hombre occidental se puede dividir en dos partes < Yo he viajado por todo el mundo y he observado a toda clase de idiotas >, y son las siguientes: La primera es la diversión y la segunda la resaca. En cuanto pasa la resaca es hora de divertirse. Es un círculo vicioso, se mueven entre estas dos cosas, desperdiciando sus vidas sin llegar a ninguna parte.

No se puede decir que llegar a la tumba sea llegar a alguna parte. Lo único que significa es que la rueda está tan cansada y tan aburrida de divertirse y sufrir resacas que ya es hora de descansar en una tumba.

La gente sólo descansa en sus tumbas. Sólo en la tumba tienen tiempo para descansar.

En Oriente, hemos elegido la gestalt opuesta. Hemos descubierto tesoros, misterios y secretos, pero el problema con lo interior es que no se puede materializar. No es algo que se pueda demostrar en un juicio, ni siquiera puede haber un testigo. En tu mundo interior sólo puedes entrar tú, nadie más. Naturalmente, poco a poco, Oriente ha ido produciendo individuos aislados y estos han sido hostigados por la masa, por el mundo. Ellos querían su silencio interior, su serenidad interior, su calma, no ser molestados. La solución era renunciar al mundo yéndose al Himalaya o perdiéndose en un bosque donde pudieran ser ellos mismos.

Ambas alternativas suponen escoger una mitad del hombre. Pero si escoges una mitad del hombre, caerás en algún tipo de desdicha. Pueden ser diferentes tipos de desdichas, pero están absolutamente garantizadas.

Cuando la humanidad aprenda a meditar y a tener un enfoque científico del mundo a la vez podremos entrar en una nueva fase completamente nueva sin continuidad con el horrible, insano, enfermo, y demencial pasado.

Osho