Los Cuatro Cuadrantes de la Vida
Podemos estar bloqueados en una de estas 4 polaridades.
Para reequilibrar, hay que volver a poner movimiento, consciencia.
1. Nuestras Observaciones van al inconsciente
2. A alimentar nuestros Pensamientos
3. Lo cual permite tener un Resentir, una emoción
4. Para Hacer, actuar, entrar y expresarse en la acción
La observación del Acontecimiento produce Pensamiento.
Es el lugar de nuestras Creencias y de nuestros Conflictos Candado4.
La Emoción elaborada a partir de ahí puede congelarse, quedarse bloqueada en diversos
Resentires (goma – tintero).
Lo que sale de nuestro cuerpo (Predicados – gestos inconscientes) modifica nuestro
Comportamiento en consecuencia.
La enfermedad es la expresión última de esto
En terapia
A partir de la zona de bloqueo (Pensamientos – Hacer), remontar hasta el Resentir – el lugar en el que duele, en el que hay llanto, para ponerle conciencia y movimiento (desbloqueo).
Es ahí y en ningún otro sitio
Somos nuestros órganos y solo podemos hablar mediante nuestros órganos.
La enfermedad es la respuesta del cuerpo a un conflicto inconsciente, no resuelto.
Para poner consciencia, el portal de entrada en Biología permite detallar los diversos tránsitos que hay entre los resentires y la enfermedad.
Los conflictos candado habrá que tratarlos primero. Pueden ser la causa del rechazo de la terapia, y al bloquearla la llevan al fracaso.
El Conflicto Desencadenante
Es el conflicto que pone en marcha la enfermedad, la reacción biológica de supervivencia
El conflicto desencadenante abre el programa creado por el conflicto programante: lo pone en marcha, lo vuelve activo (mientras que, hasta ahí, el conflicto programante estaba latente, dormido).
1. DESENCADENAMIENTO DE LA ENFERMEDAD
Cualquier elemento que recuerde el contexto del conflicto programante puede disparar la enfermedad.
Puede ser un olor, un elemento químico, una emoción, un lugar… No es forzosamente un drama con un resentir intenso.
2. CONFLICTO PROGRAMANTE Y DESENCADENANTE
En ciertos casos sucede que un solo acontecimiento, sea cual sea la edad, sea lo bastante intenso y duradero, y esté lo bastante inhibido como para desencadenar la enfermedad.
En este caso, un conflicto puede ser a la vez programante y desencadenante.
En terapia:
• La terapia debe interesarse por el conflicto desencadenante, con el fin de alcanzar y encontrar el conflicto programante. No basta con no volver a abrir el programa: hay que eliminarlo también. Si no, la persona no se cura en profundidad.
• Así pues, hay que regresar al primer aprendizaje, con el fin de que la persona lo viva con nuevos recursos que tal vez no tenía en aquel momento. Una parte de ella misma se ha quedado tal como era en esa edad del conflicto programante, pero otra parte tiene años de experiencias diversas, de aprendizajes positivos y útiles.
• Reencuadre de sentido: también se puede trabajar haciendo un reencuadre, atribuirle al evento otro sentido, es decir, cargarlo con otra emoción. Es importante que la persona pueda pasar a la tercera fase de la enfermedad y que deje de vivir ese tipo de acontecimiento de manera dramática.
El Conflicto Programante
Se trata de la primera experiencia vivida en un ámbito. Es simplemente un programa
El conflicto programante es el que se produce por primera vez.
Ejemplo: la primera vez que el niño aprende a escribir; todo dependerá de la actitud del profesor…
• De un golpe, el mundo bascula, la cosa se vuelve posible; «Yo no lo habría creído, nunca me lo había planteado».
• La persona está en contacto con una nueva experiencia, con un nuevo resentir posible. Este conflicto fragilizará a la persona, la sensibilizará hacia un tipo de resentir, sea cual sea el tema o la situación.
• No es un conflicto que dispare nada: no desencadenamos nada, solo programamos.
• El individuo imprime algo por primera vez en su historia personal, y a cuatro niveles: psíquico, cerebral, corporal y energético.
• Con el conflicto programante se instalan creencias.
• El conflicto programante explica la desproporción que existe entre evento y reacción: acontecimiento pequeño => gran reacción (reaccionamos al pasado).
1. ¿CUÁNDO?
Se producen más conflictos programantes durante la infancia y la adolescencia que en la madurez.
En efecto, en esos momentos el individuo realiza la experiencia de numerosos modos nuevos de resentir. El conflicto programante, por supuesto, puede existir durante toda la vida… Estos dos periodos de la vida son ricos en experiencias, en aprendizajes, dado que el niño
y el adolescente están descubriendo el mundo, un universo al que tienen que dar un sentido.
La primera experiencia vivida en un ámbito deja una huella muy profunda.
2. EMOCIÓN Y CONFLICTO PROGRAMANTE
Una emoción está en relación con un solo conflicto programante: así pues, hay que tratar un solo conflicto programante cada vez.
Si hay varias emociones: varios programantes.
Si la persona tiene cuatro o cinco emociones que plantean problema, podemos encontrar cuatro o cinco conflictos programantes.
Excepcionalmente, podemos encontrar un gran choc / conflicto programante que ha producido varias emociones.
Pero, en el protocolo, hay que tratar las emociones de una en una.
3. LAS VENTANAS DE IMPRONTA
El aprendizaje de los niños se realiza mediante las llamadas “ventanas de impronta”. Los niños van descubriendo un mundo al que tienen que dar un sentido.
Por ejemplo, el pajarillo considera como su madre al primer objeto o ser que ve cuando sale del huevo. Si en ese momento ve un par de botas, tendrá preferencia por seguir a ese par de botas antes que a su madre. Si es una pelota de tenis, seguirá a la pelota y, de adulto, procurará copular con ella…
Estas ventanas de impronta son determinantes, pero de modo arbitrario o incluso inútil. El niño pasa por ventanas de impronta ligadas a las fases de su desarrollo psicobiológico.
Todo evento que se presente adopta un relieve desproporcionado que será determinante para la vida entera. Una observación banal hecha por los padres puede ser determinante,
«programante», si el niño se ha sentido herido, desvalorizado o no reconocido.
Con el evento y con el sentido que se le atribuye, se instala una creencia, en torno a la cual se construirá la personalidad.
4. CONFLICTO PROGRAMANTE Y DESENCADENANTE
En algunos casos ocurre que un único acontecimiento, sea cual sea la edad, sea suficientemente intenso y duradero, y quede suficientemente inhibido como para disparar la enfermedad. En ese caso, un conflicto puede ser a la vez programante y desencadenante.
En terapia:
• Es fundamental tratar el conflicto programante y no el conflicto desencadenante.
• Tratando el conflicto programante, se tratan al mismo tiempo todos los conflictos desencadenantes correspondientes.
• El conflicto desencadenante únicamente se utiliza para encontrar el conflicto programante, que será el que se trate.
• No se debe tratar más que una emoción cada vez.
El Conflicto Programante Estructurante
Es un conflicto programante que encontramos en la primera infancia
• El niño se estructura en relación a ese conflicto. => pone un sentido fundador sobre lo que ocurre, porque es una primera experiencia.
• Ese conflicto aparece en el momento de los primeros aprendizajes, también llamados ventanas de impronta, que se dieron mal: el niño estructura su personalidad en relación con su entorno cultural, social y familiar, y adopta un comportamiento. => ¡Uno se estructura con aquello que encuentra!
• Ese conflicto se queda congelado en una manera de estar en relación con el mundo para satisfacer las necesidades vitales: comer o morir, amar o estar en peligro, placer o dolor, bien o mal, protegido o agredido, en contacto o separado…
1. ¿CUÁNDO?
Siempre en la primera infancia.
2. EJEMPLOS
– El niño: hace su casa con papá y mamá.
– El esquimal: su norma es el frío. Se estructurará en relación con el frío.
– El africano: su norma es el calor. Se estructurará en relación con el calor.
– Padres muy cercanos, muy sentimentales: el niño se estructura en relación con eso.
– Padres que emiten un mensaje negativo: «Te quiero si te estás callado» = mala estructura… porque «Te quiero si no existes » Etc.
3. TERAPIA
• Dar siempre tiempo y opciones de elegir.
• Localizar el conflicto estructurante con el fin de no cuestionar la estructura. Dar solamente la opción: la persona puede conservar su estructura, pero se le da información, y ella se da cuenta de que es posible otra estructura, de que puede añadirla para luego poder elegir entre las dos: puede escoger y podrá experimentar una y la otra con toda tranquilidad…
• No tocar forzosamente la infelicidad, sino añadirle una felicidad posible al lado, dando la opción de elegir.
En general, la persona suele escoger la buena solución.
Gráfico Línea del Tiempo Biodiana
Los Tres Señuelos del Inconsciente
El Otro no existe
• En mi realidad biológica, el otro no existe, todo es yo.
• Recreamos sin cesar al otro, el mundo exterior, con nuestro mental y nuestra memoria. Si el niño está malo, a la madre le duele la tripa; si se cae al suelo, a ella le duele la rodilla.
• La escena contada crea una emoción. El resentir está, al instante, en nuestro interior.
• Lo cual abre la puerta a todos los conflictos por identificación. Identificación en el resentir que se supone que está viviendo el otro: nos podemos identificar con alguien que en absoluto tiene el mismo resentir que nosotros le suponemos.
El Tiempo no existe
• Todo está en el instante, la experiencia tuvo lugar hace mucho tiempo y es como si se estuviera viviendo en este momento. No hay pasado, solamente presente. Al final, lo único que cuenta es: «a mí me está atravesando un resentir, una emoción.» Lo que ocurrió hace treinta minutos, veinticinco años o dos siglos parece idéntico: para el inconsciente el tiempo no existe.
• Existen en nosotros simultáneamente dos lógicas:
– Una, irracional, visceral (tripal) para la que no existen las variaciones del tiempo; para ella todo es eternamente presente, y solamente conoce el presente.
– La otra, racional, intelectual, conoce pasado, presente y futuro.
El consciente puede no establecer la conexión entre un síntoma y su causa, pero el inconsciente sí que lo hace. Se quedó detenido en un acontecimiento inhibido
Lo Ilusorio no existe
• Para mi realidad biológica todo es verdad.
• El inconsciente biológico no conoce lo ilusorio, solamente conoce lo real. Cuando recibimos un regalo, no es únicamente ese objeto que tenemos en la mano, sino que en nuestra realidad es el signo de una amistad, de una gentileza, de una atención delicada, un signo de nuestra valía y de la atención que se nos dispensa.
• Viendo una película, podemos llorar, aun cuando lo que se proyecta es algo ilusorio.
• Por eso en terapia una solución simbólica es igual de eficaz que una solución real. Tanto si le expresamos de verdad nuestras opiniones y quejas a un compañero maleducado, como si lo hacemos con un terapeuta o un amigo, o con un símbolo, el hecho tiene un efecto igualmente liberador.
ASÍ PUES, TODO ES YO, TODO ES EN EL INSTANTE, TODO ES VERDAD, TANTO SI ES PARA
LA ENTRADA EN ENFERMEDAD O LA ENTRADA EN SANACIÓN
PROTOCOLO: LA BOLITA
OBJETIVO: Aprendizaje del resentir a través de las sensaciones corporales.
INTERÉS: Descubrimiento del impacto de lo virtual en el cuerpo, de un elemento exterior sobre el cuerpo.
TÉCNICA: Utilización de un medio.
1. CREACIÓN DE LA BOLITA
› En una hoja de papel: escribir el nombre de una persona a la que se odia, de un animal, de un objeto, de un alérgeno o de una actividad altamente conflictiva.
› Escribirlo en mayúsculas, en minúsculas, con la mano derecha, con la mano izquierda, por los dos lados de la hoja, en grande, en pequeño, etc.
› Hacer una bolita con la hoja de papel, atentos a las sensaciones y a nuestro resentir.
2. DESPLAZAMIENTO DE LA BOLITA ALREDEDOR DE LA BOCA
› Acercar esta bolita a la boca y observar lo que nos ocurre dentro.
› Alejar esta bolita de la boca y observar lo que nos ocurre dentro.
› Alternativamente, volver a alejar y a acercar y observar lo que nos ocurre dentro.
› Cifrar la contrariedad: tras haberlo observado bien, cifrar de 1 a 10 la contrariedad. (0 = neutro / 10 = insoportable)
› Continuar hasta estar a gusto: hacer esos gestos hasta estar a gusto con la bolita cerca de la boca (si fuera necesario, si permanece el resentir, hablarlo con alguien).
3. DESPLAZAMIENTO DE LA BOLITA POR TODO EL CUERPO
› Pasar la bolita por el cuerpo y permanecer un ratito en cada lugar en el que el cuerpo reacciona con sensaciones.
› Cifrar la contrariedad de 0 a 10.
› Continuar hasta que ya no haya reacción en el lugar afectado y cambiar de sitio, y así sucesivamente (si fuera necesario, hablar con alguien del resentir que tenemos: de lo nunca dicho ni expresado, hasta que se produzca la transformación de ese resentir).
4. ESCRIBIR CADA UNO SUS IMPRESIONES DESPUÉS DE ESTA EXPERIENCIA
5. DISPONER DE LA BOLITA SEGÚN EL DESEO O LA OPCIÓN DE CADA UNO
› Conservar un trocito de la bolita: «Es un testigo de lo vivido de mi experiencia, lo dejo que desaparezca de manera natural».
› Disponer del resto a voluntad: arrojar, sumergir, quemar, ahora o más tarde.
OPCIÓN
1. VOLVER A COLOCAR LA BOLITA DELANTE DE LA BOCA
› Si «X» es una persona: «¿Qué quiero decirle? ¡Y lo digo!»
› Si «X» es un animal, un objeto, un alérgeno, etc…: hacer como si fuera una persona: decírselo (a la bolita)
› Si «X» es una persona: «¿Qué quiero hacerle? ¡Y lo hago!»
› Si «X» es un animal, un objeto, un alérgeno, etc: hacer como si fuera una persona: hacérselo a la bolita.
2. ¿QUÉ NECESITA X?
› En el caso en que «X» es una persona y está en una demanda particular, una necesidad insatisfecha, es posible hacerse estas dos preguntas:
› ¿Qué necesita realmente «X» para ponerse en movimiento? Hacérselo a la bolita.
› ¿Qué necesita realmente «X» para conectarse consigo mismo? Dejarse percibirlo y hacérselo a la bolita.
› Simbolizar lo que le es necesario a «X» para que se dé una profunda transformación en él.
› Volver a pasarse la bolita por el cuerpo.
› Observar las diferencias.
3. SENTARSE ENCIMA DE LA BOLITA
› Cifrar el malestar de 0 a 10
› Continuar hasta que ya no haya reacción
› (si fuera necesario, hablar con alguien del resentir, hasta que se produzca la transformación de ese resentir).
4. COLOCAR LA BOLITA DEBAJO DE LOS PIES
› Cifrar el malestar de 0 a 10
› Continuar hasta que ya no haya reacción. Luego pasar al otro pie (si fuera necesario, hablar con alguien del resentir hasta que se produzca la transformación de éste).
PROTOCOLO: IR A LA BIO-DIANA
OBJETIVO: recoger las informaciones para construir la diana
1. EL PACIENTE IDENTIFICA UNA SITUACIÓN EN LA QUE HA TENIDO UN RESENTIR NEGATIVO
2. ESTAR ASOCIADO AL ACONTECIMIENTO:
› El paciente se asocia a esa situación definida con precisión (día, lugar, hora…) hasta estar en… Resentir…
3. EL TERAPEUTA PREGUNTA:
› ¿Qué es lo que ocurre en esa situación?
› ¿Qué estás haciendo?
› ¿Qué piensas?
› ¿Qué sientes? ¿Cuáles son las emociones?
› ¿Cómo transcurre esto en tu cuerpo? ¿Cuáles son tus sensaciones?
› ¿Qué te trae esto? ¿Cuál es tu resentir?
4. ACOGER Y AMPLIFICAR
› El terapeuta ayuda al paciente a acoger y amplificar el resentir-acontecimiento.
5. IDENTIFICACIÓN DEL RESENTIR
-El paciente identifica un resentir negativo y el momento en el que lo ha sentido la última vez ( desencadenante )
6. COLOCAR UNA LÍNEA DEL TIEMPO
-El paciente imagina su línea del tiempo y sitúa el presente ..y va hacia atrás..
7. EL PACIENTE SE POSICIONA ENCIMA DE ESE INSTANTE
-El paciente se posiciona en la línea del tiempo en la que ha tenido ese resentir negativo
8. ENCONTRAR EL INSTANTE DE ANTES, EN EL QUELA SENSACIÓN AÚN NO HA APARECIDO
– El paciente retrocede hacia el pasado; hasta el momento en el que ya no está en esa sensación.
9. HACER LA BISAGRA
-Con el fin de reencontrar el momento exacto del Bio-choc, avanza un pasito o retrocede otro pasito ( seguir la necesidad ) para encontrar el instante en el que da comienzo la sensación: ese momento exacto es llamado ” la bisagra “. Antes no hay nada y en ese momento empieza ..
10. ACOMPAÑAR Y ANIMAR
-Dejar que el paciente exprese, exteriorice todo lo que venga : emociones, palabras, gestos .. y animarle a que lo haga ..
También se puede hacer antes de volver en la línea del tiempo que el paciente vaya al futuro .. donde es más grande que en el momento actual . mirándose en ese instante donde es niño .. para luego volver al momento presente, resignificado .. marcando así la misma figura del infinito ..
Pasado Presente Futuro