La Aparición del Principio de la Enfermedad
Una fuerza de atracción reúne elementos dispersos, polvo de estrellas estalladas, y eso fue la Tierra. Dicha fuerza ¿ no es lo que los antiguos griegos llamaron Eros ? En el seno de la materia, tanto si es gaseosa, líquida o sólida, las moléculas chocan entre ellas a gran velocidad, sometidas a fuerzas de repulsión y, al mismo tiempo, a fuerzas de cohesión. En el seno del océano, diversas reacciones químicas produjeron las primeras ” moléculas vivas “. El hombre sabe, actualmente, reproducir ese fenómeno en un laboratorio. Ciertas moléculas vivas captaron clorofila y se convirtieron en algas azules, pero otras no lo hicieron y se convirtieron en bacterias. La alianza entre bacterias y algas dio como resultado la aparición de las células eucariotas, más grandes, equipadas con núcleos donde guardar los genes. Tras haber perdido la capacidad para practicar la fotosíntesis, algunos de esos seres primitivos empezaron a nutrirse se sus congéneres hasta que fueron convirtiéndose en animales. Todos esos seres compuestos de una sola célula microscópica tenían una identidad eterna, puesto que se clonaban a sí mismos indefinidamente dividiéndose en dos y, recuperando cada parte, el volumen original para volverse a dividir en dos.
La Sexualización, cuando aparecieron Adán y Eva
Mecidos por el océano, estos ancestro vivos encontraron algunas dificultades ( calor, frío, glaciaciones, lluvia de meteoritos, modificaciones de ph, cambio de los polos magnéticos, cambios de luminosidad, paso de una atmósfera carbónica a otra oxigenada, rayos que carbonizaban y descomponían elementos, predación, etc) que podrían haberlos hecho desaparecer. La supervivencia exigía cualidades de adaptación muy rápida. Dichos seres vivos primitivos sólo podían evolucionar gracias a breves y aleatorios acoplamientos ciliares ( prefiguración del coito) que les permitía intercambiar extremos de cromosomas o telómeros ( la conjugación bacteriana). Estos telómeros con libros de historia que se van escribiendo a medida que el ser vive episodios complejos y evoluciona para adaptarse. Pero la evolución obtenida por estos medios es realmente lenta. Cuando todo parece establecido, llega un elemento nuevo y desestabilizador que impide a los seres vivos mantener sus hábitos, forzándolos a mutar. La naturaleza se perfecciona por necesidad y la sexualización fue una respuesta lógica y realmente genial: Si se necesitan dos individuos para crear un tercero, el aporte de información sobre el medio y las vivencias se dobla, las zonas de competencia ( capacidades de adaptación) de cada uno de los progenitores se ven reunidas en el nuevo individuo. Un día, o quizá fue una noche, Adán, una célula restante de la reproducción por escisiparidad, se sacó una de sus costillas receptoras, una parte femenina que se convertiría en Eva ( fuerza de puesta en marcha). La otra costilla sería el emisor, masculino. Ambos lados se separaron. El mito bíblico de Adán y Eva relata la aparición del principio masculino y del principio femenino, a partir de una célula andrógina.
La sexualización hizo evolucionar los linajes muy rápidamente y estos pudieron explorar y conquistar nuevos espacios en el curso de la historia de los seres vivos, ciertas especies evolucionaron para más tarde involucionar. Reproducción asexual, después reproducción sexual, vuelta a la reproducción asexual .. Estas alternancias y variaciones tenían un sentido de cara a la supervivencia. Algunas especies vegetales o animales tienen, en la actualidad, ambas posibilidades para reproducirse empleando una más que otra según las variaciones del entorno.
Algunos seres vivos pueden, así mismo, volverse machos o hembras: es el hermafroditismo sucesivo de las esponjas, de ciertos moluscos y anfibios o delmero, por citar unos cuantos.
Esta constatación nos lleva a tomar conciencia de la facilidad con que de los seres vivos pueden evolucionar, involucionar, mutar, incluso fusionarse con otros diferentes ( la quimerización ) para adaptarse al entorno cuando este constituye un problema. Para ello, es importante mantener un cierto savoir faire, una memoria morfológica o funcional que puedan servir en una época, de manera que el ser vivo se equipa de bancos de datos, esto es , cromosomas y una organización espacial de estos en el núcleo, los genes, para que los descendientes puedan servirse de estas viejas recetas. Los genes son la memoria necesaria de respuestas dadas a problemas que nuestros ancestros sufrieron. Son testigos de lo vivido.
Y la Función creó al órgano
Igual que los átomos se unen entre sí para constituir moléculas y se mantienen unidos porque esa organización les permite economizar energía, los seres vivos unicelulares se asociaron ¡Para ser más fuertes y más grandes! Ya sabemos que un todo es superior a la suma de sus partes. La asociación permite economizar energía. Los seres pluricelulares se formaron entonces, formando racimos de células aglutinadas. Luego, entre las diversas células de dichas racimos, se elaboraron circuitos, mediante moléculas mensajeras que asegurasen la comunicación entre las diversas partes del todo.
La Ley Universal de la economía también en este ámbito, ideó una especialización de las células en el seno del ” individuo pluricelular “. Solamente algunas células ( que se convertirán bien en ovarios, bien en testículos, pistilos y anteras) recibieron la misión de ocuparse de la reproducción, como en un panal la abeja reina se dedica a poner huevos, mientras el resto de la comunidad le asegura la alimentación.
Para que la provisión alimenticia sea más regular y menos dependiente del momento, se formó el hígado, como expresión aumentada de la parte de la célula que antes cumplía esa misma función.
La vejiga se creó para almacenar, y no para eliminar de manera continua, la orina, como antes de que se necesitara marcar el territorio como después de hacerlo, para lo cual es necesario acumular mucha cantidad. Las aletas son órganos especializados que aparecieron para permitir desplazamientos rápidos en el agua. Con el tiempo, las aletas fueron mutando en patas, en el momento en que los animales marinos salieron del agua para adentrarse en tierra firme, convirtiéndose en anfibios, luego en reptiles, ratas, monos, etc, hasta llegar al ser humano moderno.
Cada nueva generación es ligeramente diferente de la precedente. Al cabo de x generaciones, el hígado ya era considerablemente voluminoso, compuesto de muchas más células y todo el conjunto también era mayor. En el curso de las evolución, las células evolucionaron adaptándose a su cambiante biotipo, adaptando sus tejidos en cantidad y en calidad.
“Los tumores son debidos a este fenómeno.. los llamados enfermedades cuando se manifiestan en un individuo y sólo en su linaje, durante diversas generaciones”
La Ley Universal de economía hace que una célula reforzada en un momento preciso pierda ese equipamiento cuando ya no es útil en otro momento. Las lisis óseas, las atrofias, tienen su génesis en este fenómeno estrictamente adaptativo. El kiwi, (pajarito de Nueva Zelanda ), al no tener predadores perdió su capacidad de volar.
Una Simpaticotonía Adaptativa
La duración de la vida de los seres pluricelulares aumenta porque las células que los constituyen se renuevan un cierto número de veces antes de que el organismo muera. Pero, al mismo tiempo, la frecuencia de los problemas (riesgo de muerte, ser víctima de un predador) empuja a los seres a elaborar nuevas estrategias de adaptación ( más rápida que la reproducción sexual), para permitir al individuo ( y no solamente a su linaje) aumentar sus oportunidades de supervivencia.
Este sistema de adaptación ultrarrápido se compone de almacenamiento de información y de un detonante. Toda las experiencias antiguas ( nada de lo que aconteció a los ancestros se olvida), todas las memorias que conciernen a la adaptación ( artimañas, combate, estrategias, respuesta de los tejidos, órganos .. ) están almacenadas en los genes. Las experiencias más recientes del linaje están inscritas de manera epigenética gracias a una especie de pasillos en los territorios cromosómicos ( en su fase descondensada) ¿con moléculas de ARN, con proteínas, con la memoria del agua? No lo sabemos aún con precisión. Llamamos a estas inscripciones ” Memoria Celular “.
Se necesitó un sistema detonante que buscara, en el menor tiempo posible, dentro de los genes, las viejas estrategias que pudieron ayudar al individuo. Y ése fue el sistema simpático. La simpaticotonía permite a los individuos, abocados al trabajo, mantenerse vivos más tiempo por ejemplo, en el caso de la necesidad de aire, una red de nervios y secreciones moleculares despiertan los genes de los alveolos pulmonares. Su expresión genética es, entonces, otra; la división celular no se detiene aunque el problema persista.
Un tumor es, pues, evolución acelerada. Un tejido muta, en algunas semanas, usando los conocimientos que la evolución de la especie tardó años en elaborar.
El ADN es el elixir de la longevidad.
La aparición de la enfermedad es paralela a la aparición de la vida. El concepto ” enfermedad ” en sí mismo, deriva de las miradas estupefactas con las que hemos contemplado ese fenómeno, por otra parte tan natural como útil. Gracias a la simpaticotonía y a sus moléculas mensajeras, a las hormonas, a los neurotransmisores y al sistema inmunitario, la vida de los seres complejos (pluricelulares) se hizo más larga. Cuando la sexualidad permitió sobrevivir a las especies, dándoles el medio de adaptarse rápida y ampliamente a los problemas, el sistema neurovegetativo simpaticotónico se añadió para permitir, esta vez sí, la supervivencia del individuo. Porque vivir más tiempo, siendo viejo, gracias a una enfermedad, es procrear más, enriquecer el clan con nuevos conocimientos, con trabajo, con su presencia y aumentar de este modo la supervivencia de todo el linaje.
La Vagotonía Reparadora
Tras el esfuerzo llega el confort: la simpaticotonía deja paso a su contraria, la vagotonía, que pone ( o intenta poner) al órgano en sus funciones y estado anterior. Los órganos reciben la orden, por parte del cerebro, de volver a ser lo que eran. ¿No es un plan perfecto?
Frío y Caliente
Los órganos están doblemente estimulados por esos dos sistemas antagónicos que son la simpaticotonía y la vagotonía. Las enfermedades que afectan a los seres vivos son de dos naturalezas: enfermedades frías (sin fiebre), a menudo discretas, desencadenadas por el sistema simpático adaptador, y las enfermedades calientes (inflamatorias, infecciosas, edematosas) desencadenadas por el sistema vago reparador)
Una enfermedad fría precede siempre a una caliente. Es así en personas y animales desde hace miles y miles de años, pero no lo habíamos comprendido hasta ahora. Las reacciones químicas entre moléculas diferentes son reversibles bajo ciertas condiciones. ¿Por qué vamos a dudar entonces, que las reacciones celulares como el cáncer puedan también ser reversibles, dado que los seres vivos también están compuestos de moléculas?.
Del Cerebro Neurovegetativo al Cerebro Psíquico
En el curso de la evolución, se construyó una central de mando para gestionar armoniosamente las diferentes partes del organismo, en beneficio del individuo, se trata del cerebro neurovegetativo autónomo ( dado que es independiente de nuestra conciencia ). Cada época paleontológica se caracteriza por aprendizajes nuevos, por la evolución de las relaciones con lo vivo y con los minerales. En cada ocasión, nuevas capas de neuronas y glías se iban incorporando, afectadas por la memoria, por el psiquismo, por el pensamiento consciente y permitiendo la imaginación, la construcción de creencias, la curiosidad .. El cerebro de los humanos aumentó progresivamente su volumen alrededor de un primitivo cerebro emocional (sistema límbico ) memorizando el estrés y reactualizando datos.
La comunicación entre las diferentes zonas cerebrales que establece el pensamiento, las ideas, las palabras oídas y todo lo percibido, pueden – según la intensidad de la emoción provocada – actuar sobre todas las partes del organismo mediante el sistema neurovegetativo.
Un terror violento, una angustia pronunciada desencadenan una descarga masiva de catecolaminas dinamizadoras (adrenalina, noradrenalina, etc ). Pero éstas, al mismo tiempo, podrían provocar la muerte instantánea del individuo si no existiera algún sistema de derivación. El sistema neurovegetativo autónomo envía la energía hacia el órgano-objetivo, que enferma en el instante posterior al trauma o bien despierta al individuo de su apatía permitiéndole sobrevivir un tiempo más. Si el cerebro pesa alrededor de 1.300 grs y el cuerpo unos 55.000 grs es lógico que todo el organismo reaccione para gestionar el estrés.