Todo es Energía
La Ignorancia es la causa fundamental del sufrimiento
Buda
Tú ves, la Vida es inteligente.
La Vida es todopoderosa.
Y la Vida está buscando expresarse siempre y en todo lugar.
Aún más, nunca está satisfecha: está constantemente buscando una expresión mayor y más completa.
Desde el momento en que un árbol deja de crecer, busca dondequiera que sea nuevas formas de expresarse mejor.
Desde el momento en que tú dejas de expresar más y más Vida, desde ese momento la Fuerza de la Vida comienza a buscar alrededor nuevas y mejores salidas.
Liberar la carga no es lo mismo que borrar el recuerdo de los hechos; implica liberar la energía vital atrapada, con el fin de usarla para el crecimiento y la autosanación.
La física cuántica ha descubierto que aun el elemento más denso y sólido, estudiado en un nivel infinitesimal , adscriben no es lo que parece. Los científicos que nuevo paradigma afirman que cualquier elemento de existencia visible o palpable, cuando es reducido al nivel de las partículas que lo conforman, no es nada más ni nada menos que espacio vacío en un 99,99 por ciento. Así, la idea de que un elemento o un objeto tiene posición, masa o velocidad determinadas es producto de una falsa percepción; en síntesis, todo objeto creado es una madeja energética conformada en su vasta mayoría por espacio vacío y por partículas cuyo estado no se puede determinar, ya que están entrando y saliendo continua- y mente del estado de existencia. Ahora bien, como cada uno de nosotros es parte de este universo hecho de energía fluctuante y cambiante, todo y en nosotros -y todo lo que nos rodea- tiene también esa misma calidad energética. Todos nosotros formamos parte de un inmenso océano energético percibe tu cuerpo y las cosas que lo rodean, y date cuenta
En los primeros meses de nuestra vida, mientras tenemos que sobrellevar y superar todas estas “discapacidades”, somos seres adorables y amorosos. A esa edad, nuestra naturaleza consiste en dar y recibir amor. Somos inocentes, espontáneos y auténticos en todo momento. Nos sentimos libres de pedir o de rechazar cualquier cosa, cualquier acontecimiento, e incluso a cualquier persona. Sentimos lo que sentimos sin culpa ni vergüenza, “Todos los bebes de todas las eras históricas y en todas las diferentes culturas han venido a este mundo con esa misma resonancia de gozo, amor y libertad. Y así también será en el futuro. Porque esa resonancia es nuestra marca de fábrica”,
Todo comienza en el ditero materno. No existe relación más intima que la que tenemos con nuestra madre antes de nacer. Durante esos nueve meses nos sentimos cómo dos y protegidos, si nuestra madre nos quería. No podríamos concebir un lugar más placentero, un lugar más nuestro, y esa sensación de bienestar es maravillosa. Nuestro cuerpo es creado en ese estado natural de confort. Mientras dura nuestra gestación, permanecemos en un estado de apertura y absorción total y lo que nos es dado llega de manera incondicional, sin esfuerzo.
Mientras dura nuestra etapa como bebés, no filtramos nada de lo que recibimos. ¿Por qué habríamos de hacerlo, especialmente si nos sentimos inundados de amor y eso nos resultó agradable por espacio de nueve meses .. ? Pero, mientras que la necesidad de experimentar esa conexión de amor, bienestar e intimidad es constante (e incluso persiste cuando estamos cuando somos adultos), sentimos la vida fuera del útero como una perpetua experiencia de separación, tan opuesta a la vida intrauterina que podemos percibir esta separación como algo intensamente incómodo o doloroso.
Lamentablemente, ni siquiera el ambiente familiar más amoroso y comprensivo va a poder evitar que este proceso de contracción ocurra. Adondequiera que va, el bebé se encuentra con la inevitable experiencia de la separación. Se le va a dar un nombre que representará una identidad y será tratado como alguien que está separado de todo lo demás.
Y, a pesar somos en realidad, se transforma en un medio útil para protegernos de nuestras primeras experiencias dolorosas.